Las Oficinas Municipales de Información y Tramitación Administrativa (OMITAS) del Ayuntamiento de Cartagena prestarán a partir del lunes 16 de septiembre especial atención a los afectados por las inundaciones. La alcaldesa, Ana Belén Castejón, ha pedido a todos los servicios municipales que den prioridad a los afectados por las inundaciones, tanto para solventar las cuestiones que dependen del Gobierno municipal como para canalizar sus demandas y peticiones.

El objetivo de ofrecer servicio desde la OMITA es que los vecinos, especialmente los de los pueblos ribereños y los de las diputaciones más dañadas, puedan registrar las incidencias provocadas por las lluvias de los últimos días.

El Gobierno municipal, presidido Ana Belén Castejón, quiere facilitar con esta medida a los vecinos asesoramiento de cara a los trámites ante el consorcio de compensación de seguros, así como hacer una evaluación inicial de los daños sufridos, tanto públicos como privados, para trasladarla al Gobierno Regional y a la Delegación del Gobierno.

Los vecinos podrán presentar sus incidencias en cualquiera de las 21 OMITAS distribuidas por todo el término municipal o a través del correo Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla

Ver localización, horarios y correo electrónico de las OMITAS: pinchar aquí

Recorrido del gobierno municipal

La alcaldesa, Ana Belén Castejón, ha estado en La Aljorra y en las diputaciones de La Magdalena y Galifa, en las zonas norte y oeste del municipio; mientras que la vicealcaldesa, Noelia Arroyo, y la concejala de Servicios Sociales, Mercedes García, han visitado las poblaciones de Los Urrutias, Punta Brava y Los Nietos.

En La Aljorra la alcaldesa ha supervisado las labores de limpieza tanto del cauce de la rambla como de la carretera que comunica con Fuente Álamo. En la zona oeste ha comprobado que se restablecía la normalidad en los caminos rurales, ya que algunas viviendas habían quedado incomunicadas por los arrastres y desprendimientos.

Por su parte la Noelia Arroyo y Mercedes García han podido constatar cómo los operarios municipales y de las concesionarias se afanaban en limpiar sin descanso las calles de barro y despejar los paseos marítimos de todo lo que había arrastrado la crecida hacia el Mar Menor. También cómo colaboraban con los vecinos para sacar enseres de sus viviendas que han quedado inservibles.